GESTIÓN DEL TIEMPO EN MOMENTOS DE ESTRÉS
El ser
humano es complejo. Generalmente, solemos usar el tiempo en tareas que no
suelen ser importantes, usando dicho tiempo como un recurso abundante. Sin
embargo, cuando nos damos cuenta de que se trata de un recurso limitado,
entramos en fases de control sobre el crono, lo que nos lleva a momentos de
estrés y ansiedad.
Estos
momentos afectan no sólo a nuestra vida personal, sino que también pueden dar
alcance al mundo laboral, y ahí es fundamental tener alguien con las
habilidades directivas relacionadas para resolver este tipo de problemas.
Lo primero,
es que debemos de ser conscientes de que no podemos hacerlo todo. No pasa nada
por tener que delegar algunas tareas de las que puedan ocuparse otras personas.
También es importante desechar aquellas labores que no vayan a aportarnos nada,
para lo cual debemos establecer prioridades, siguiendo un orden claro.
La
productividad es otro factor de importancia para la gestión del tiempo. Si
somos productivos, evitamos perder tiempo (y ganar estrés). Una recomendación
sería ocuparse de las tareas en un momento en el que estemos menos cansados
(generalmente al comienzo del día), tanto física como mentalmente. Para evitar
el cansancio, otra alternativa sería programar descansos cada cierto tiempo (20
minutos de descanso cada 90 de trabajo es uno de los métodos más seguidos). Por
último, es vital alejar posibles distracciones que afecten a nuestro
rendimiento.
Pero no sólo
es importante gestionar el tiempo. A veces, por mucho que controlemos el reloj,
no podemos evitar tener momentos puntuales de estrés, debido a lo cual también
es esencial controlar el mismo. El primer paso, es identificar las causas
concretas que lo provocan (en estos casos suele estar directamente relacionado
con la exigencia en el trabajo, ya sea personal o por parte de algún superior).
Una vez hecho esto, podemos optar por diferentes vías, como intentar apartar
los factores estresantes en la medida de lo posible, o bien modificarlos de
forma que el estrés logre desaparecer.
La interrelación
vida profesional-vida personal puede ser un factor determinante, y no podemos
permitir que lo malo de un lado nos afecte en el otro. Esto parece difícil,
pero no es nada que con un cambio de actitud no se pueda arreglar.
Esperemos
que estos consejos os hayan servido de ayuda en cuestiones de este tipo, y que
podáis afrontar sin problemas la gestión del tiempo y el estrés derivado de
este.
Por Ana
Pastor Muñoz, Rubén Peña Tizón y Mirian Quiñones Barroso

Artículo muy interesante, cierto, con el que me identifico bien. Es cierto que pasamos mucho tiempo haciendo cosas que no son de suma importancia en nuestras vidas, pensando que el tiempo es ilimitado. Lo primero que me viene a la mente son las redes sociales. Y el estrés llega cuando nos damos cuenta de que, de hecho, el tiempo es un recurso limitado, ya que algunas cosas tienen que hacerse en un momento dado, por ejemplo.
ResponderEliminarComo has dicho muy bien, además del tiempo, hay otros factores que aumentan nuestro estrés, entre ellos: la fatiga, la personalidad, la falta de competencia....
Gracias por todos estos consejos, que también comparto.
Artículo muy interesante, cierto, con el que me identifico bien. Es cierto que pasamos mucho tiempo haciendo cosas que no son de suma importancia en nuestras vidas, pensando que el tiempo es ilimitado. Lo primero que me viene a la mente son las redes sociales. Y el estrés llega cuando nos damos cuenta de que, de hecho, el tiempo es un recurso limitado, ya que algunas cosas tienen que hacerse en un momento dado, por ejemplo.
ResponderEliminarComo has dicho muy bien, además del tiempo, hay otros factores que aumentan nuestro estrés, entre ellos: la fatiga, la personalidad, la falta de competencia....
Gracias por todos estos consejos, que también comparto.
-Sabrina.